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Defendemos nuestro derecho a decidir

Desde el Frente de Trabajadoras de la Comunicación del Chaco, formado a partir de la convocatoria internacional del 8M, buscamos trabajar por una comunicación más respetuosa hacia los derechos de las mujeres, las identidades femeninas, la niñez, la adolescencia y la tercera edad.

Como en todos los ámbitos de la vida social, la comunicación y el periodismo están atravesados por la violencia del patriarcado y reproducen en su discurso ese tejido de exclusión y dominación.

Como dijo el lingüista ruso Valentín Voloshinov, el lenguaje es la arena de lucha por quién impone el signo.

Hoy el tratamiento mediático del proyecto de ley de interrupción voluntaria del embarazo es justamente esa arena de lucha, discrecionalmente manipulada por los intereses políticos, económicos y religiosos, que una vez más se oponen a la ampliación de los derechos humanos en nuestro país.




 

Esta Legislatura, tanto el viernes como hoy fue testigo de esa manipulación discursiva.

Escuchamos a profesionales de la salud mentir al afirmar que en Argentina, en pleno siglo XXI, los abortos se practicaban con pinzas con las que extraían, y repito tal cual lo dijeron “los bracitos y las piernitas de los bebés”.

Escuchamos también a representantes de la iglesia católica llamarnos “asesinas”, “genocidas” y hablar de la culpa (impuesta por esa misma iglesia) que sentían las mujeres que habían abortado.

No los escuchamos hablar de derechos, pero sí de la constitución, argumentando que la interrupción voluntaria del embarazo era anticonstitucional. ¿Acaso no saben que desde 1921 hay dos causales por las que el Código Penal habilita la interrupción voluntaria del embarazo?

Escuchamos también decir que el aborto era un femicidio. No nos sorprende escucharlo, cuando ni siquiera tienen en claro que la violencia de género es solamente ejercida contra las mujeres e identidades femeninas por ser mujeres y que exige que se una relación de dominación y sometimiento.

Pero en este punto si podemos ampliar y afirmar que las mujeres muertas por abortos clandestinos son víctimas de femicidio y el femicida es justamente el Estado, ese Estado que algunos pretenden que siga ausente en cuanto a garantía de derechos hacia las mujeres se trata.

El debate de esta ley nos invita a cumplir con algunas de las premisas que hacen al discurso mediático. Una de esas es el uso de la claridad y la elección adecuada de las palabras para tratar este tema para que la formación de la opinión pública sobre el mismo esté basada en datos y hechos concretos, por fuera de los valores espirituales, religiosos y morales de las personas.

No porque no sean importantes en la construcción de la visión del mundo, sino porque el tratamiento periodístico del aborto debe circunscribirse en primera instancia como una herramienta informativa para que los ciudadanos puedan desde allí formar su opinión propia del tema.

Al hablar del aborto como un problema de derecho estamos pidiendo que periodistas, comunicadoras, comunicadores y ustedes mismos, se refieran al tema como aborto legal, aborto no punible o aborto seguro, porque estos términos ayudan a entender que estamos discutiendo la libertad de elegir qué hacer con el cuerpo gestante, de ejercer o no la maternidad; y sobre todo de que exista un Estado que garantice el acceso al aborto seguro, en condiciones sanitarias adecuadas a todas las mujeres e identidades gestantes, por encima de su condición de clase o nivel socioeconómico.

Al no comunicar con claridad los alcances en derechos humanos que implicaría esta ley también estamos olvidando mencionar al menos 12 derechos constitucionales que están en tensión con la situación jurídica actual del aborto.

Todos sabemos, con mayor o menor información, que el aborto clandestino se practica en todo el país.

La arena de lucha que decía Voloshinov no es “aborto sí o aborto no”, como intenta vendernos el discurso mediático imperante.

No seamos hipócritas. No es eso lo que estamos discutiendo, los abortos se practican, las mujeres abortamos. Todas y todos somos pro aborto. Algunos, pro aborto legal, seguro y gratuito y otros pro aborto clandestino.

La arena de lucha es sobre el aborto como un derecho de las mujeres y las identidades gestantes y en qué condiciones el Estado Argentino garantiza su realización.

Queremos agradecer a las diputadas, diputados y a todas las organizaciones sociales aquí presentes por brindar este espacio de reflexión e información, que enriquece a la democracia y la formación de la opinión pública.

Queremos también dejar en claro que luchamos por una comunicación libre de sexismo y por eso queremos educación sexual para decidir, anticonceptivos para no abortar, aborto legal, seguro y gratuito para no morir

Pero por sobre todas las cosas, les pedimos, rogamos, exigimos, que para que la información que transmiten sea veraz, por lo menos si no saben, googleen antes de hablar.

Muchas gracias.


*Texto leído por miembras del Frente de Trabajadoras de la Comunicación del Chaco en las jornadas de discusión del proyecto de interrupción voluntaria del embarazo en la Cámara de Diputados del Chaco.


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